martes, 10 de marzo de 2015

LA REVOLUCIÓN RUSA.

1. El payaso trágico


El personaje principal de Prohibido entrar sin pantalones, de Juan Bonilla, que ha ganado la primera Bienal de Novela, en Lima, y que acabo de leer, no es Vladimir Maiakovski, sino el astuto, invisible y multifacético narrador: cuenta la historia simulando ser un cronista desapasionado y, de pronto, se convierte en lo que narra, es decir, en el protagonista del relato, para, unas frases o páginas después, volver a contar desde una cercanía impersonal. No hay cesuras entre lo objetivo y subjetivo, presente y pasado, lo privado y lo público, en la prosa serpentina de esta excelente novela que narra lo que crea y transgrede (sin que el lector lo note) todas las fronteras, transformándose también, por momentos, en los poemas estentóreos y las proclamas y manifiestos que el poeta futurista componía y recitaba casi al mismo tiempo en cafés, teatros, plazas, fábricas, convencido de que la poesía de vanguardia y el marxismo, aliados, cambiarían el mundo.

JUAN BONILLA 

-(Jerez de la Frontera, Cádiz, 11 de agosto de 1966) es un escritor español, ganador del Premio Biblioteca Breve en 2003 y del I Premio Bienal de Novela Mario Vargas Llosa en 2014.
-Su primera obra, El que apaga la luz, fue publicada en 1994 en la Editorial Pre-Textos. Era una recopilación de relatos que fue seleccionada por una encuesta realizada por la revista Quimera entre críticos, académicos y escritores como uno de los mejores libros de relatos de la literatura española del siglo XX. 

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2. 'El hundimiento del orden imperial y liberal abrió las puertas a los totalitarismos'

Para un continente en crisis, como era entonces Europa, era muy complicado enfrentar los conflictos de clases, ideológicos, políticos y culturales que acarreó la I Guerra Mundial
La crisis económica de 1929 "y su tremendo impacto en la sociedad alemana" habría sido un acontecimiento de vital importancia para entender el auge del nazismo. La fuerza demoledora de la Gran Guerra no se limitó solo al ámbito material y territorial, sus efectos en el terreno de la ideología y el pensamiento político posterior fueron igualmente muy violentos. El poeta T. S Elliot escribió: "aquí estoy/ cuando han pasado veinte años / -veinte años desperdiciados, los años de l'entre deux guerres- / tratando de aprender a usar palabras, y cada intento / es un total nuevo comienzo, y un distinto tipo de fracaso".
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3. Trotsky, ¿el bueno?


"Lo asocio mucho al Che. Era un mito del camino que hubiera podido haber tomado la URSS, un héroe romántico. Un futurible", cuenta el filósofo Gustavo Bueno a ELMUNDO.es. Lev Davidovich Bronstein, Trotsky, judío ucraniano, se ha visto nimbado por una trayectoria aventurera y un destino hipotético, redentor de lo peor del estalinismo. En el décimo aniversario de la Revolución de Octubre, en 1927, fue expulsado del Comité Central del Partido. Y con él, sus adeptos. Saldría el mito de Moscú, deportado por la fuerza a Alma Alta, en los confines de Asia Central, alejado incluso del ferrocarril. Un año después sería deportado de la URSS. El Politburó (con Iossif Vissariónovich Dzhugashvilicon, Stalin, bien agarrado al trono) lo borró de fotografías y de una película histórico/mitológica de Eisenstein. Once años después, también le borraron de los mapas. Fueron exhaustivos. Del tippex al piolet. "Fue un genio", dice Gabriel Albiac."Las muertes crean percepciones diferentes de los personajes históricos", explica el historiador Julián Casanova. No dejó el internacionalista Trotsky un bonito cadáver, ni joven.

Trotski 

 -Fue uno de los organizadores clave de la Revolución de Octubre, que permitió a los bolcheviques tomar el poder en noviembre de 1917 en Rusia. Durante la guerra civil subsiguiente, desempeñó el cargo de comisario de asuntos militares.Negoció la retirada de Rusia de la Primera Guerra Mundial mediante la Paz de Brest-Litovsk. Tuvo a su cargo la creación del Ejército Rojo que consolidaría definitivamente los logros revolucionarios venciendo a catorce ejércitos extranjeros y a los ejércitos blancos contrarrevolucionarios durante la guerra civil rusa; fue condecorado con la Orden de la Bandera Roja.

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